Cáncer de próstata
¿Qué es el cáncer de próstata?
La próstata
La próstata es una glándula que se encuentra presente sólo en los hombres. La próstata se encuentra justo debajo de la vejiga y delante del recto. El tamaño de la próstata varía con la edad. En los hombres más jóvenes, la próstata es del tamaño aproximado de una nuez. Sin embargo, puede ser mucho más grande en hombres de más edad. El conducto que transporta la orina (la uretra) pasa por el centro de la próstata. La próstata contiene células que producen parte del líquido (semen) que protege y nutre al esperma. La próstata comienza a desarrollarse antes del nacimiento y continúa crecimiento hasta que el hombre alcanza la adultez. Las hormonas masculinas (llamadas andrógenos), tal como la testosterona, causan este crecimiento. Mientras las hormonas masculinas estén presentes, por lo general el tamaño de la próstata permanece casi igual o crece lentamente en los adultos.
Cáncer de próstata
Existen varios tipos de células en la próstata, pero casi todos los casos de cáncer de próstata se originan en las células de la glándula. Este tipo de cáncer se conoce como adenocarcinoma. El resto de la información que se presenta en este documento se refiere solamente al adenocarcinoma de la próstata.Algunos cánceres de próstata pueden crecer y propagarse rápidamente, pero en la mayoría de los casos, estos cánceres crecen lentamente. Los estudios realizados en algunas autopsias muestran que muchos hombres de edad avanzada (e incluso algunos hombres más jóvenes) que murieron de otras enfermedades también tenían cáncer de próstata que nunca representó un problema para ellos durante sus vidas. En muchos
casos, ellos no sabían, y ni siquiera sus médico, que tenían cáncer de próstata.
¿Cuáles son los factores de riesgo del cáncer de próstata?
En un nivel básico, el cáncer de próstata es causado por cambios en el ADN de una célula
normal de la próstata. Nuestros genes se conforman de ADN que controla el comportamiento de las células. El ADN es heredado de nuestros padres. A menudo, nos parecemos a nuestros padres porque ellos son la fuente de nuestro ADN. Sin embargo, el ADN afecta algo más que nuestra apariencia. Un pequeño porcentaje (alrededor de 5% a 10%) de los cánceres de próstata se asocia con cambios heredados en el ADN. Otros cambios al ADN ocurren durante la vida de una persona. Algunos de estos cambios
pueden causar cáncer de próstata.
Factores de riesgo del cáncer de próstata
Aunque aún no sabemos exactamente qué causa el cáncer de próstata, sí sabemos que
existen ciertos factores de riesgo asociados con la enfermedad. Un factor de riesgo es
cualquier cosa que aumenta las probabilidades de una persona de desarrollar una
enfermedad. Los distintos tipos de cáncer tienen distintos factores de riesgo. Algunos
factores de riesgo, como el fumar, se pueden cambiar. Otros, como la edad de la persona
o sus antecedentes familiares, no se pueden cambiar. Sin embargo, los factores de riesgo no suministran toda la información. Muchas personas
con uno o más factores de riesgo nunca padecen cáncer, mientras que otras que ya tienen
la enfermedad puede que hayan presentado pocos o ningún factor de riesgo conocido.
Para algunos de estos factores, la asociación con el riesgo de cáncer de próstata aún no
está clara.
Edad: el cáncer de próstata es poco frecuente en los hombres menores de 40 años. La
probabilidad de padecer cáncer de próstata aumenta rápidamente después que el hombre
alcanza los 50 años de edad. Casi dos de cada tres casos de cáncer de próstata se detectan
en hombres mayores de 65 años.
Raza: el cáncer de próstata es más común en los hombres de raza negra que en los
hombres de otras razas. Los hombres de la raza negra también tienen una mayor
probabilidad de padecer un cáncer más avanzado cuando se detecta, y tienen más
probabilidad de morir de esta enfermedad. El cáncer de próstata ocurre con menos
frecuencia en los hombres asiáticos-americanos y en los hispanos/latinos que en los
hombres blancos. No están claras las razones de estas diferencias raciales y étnicas.
Nacionalidad: el cáncer de próstata es más común en Norteamérica y en la región
noroeste de Europa, así como en algunos otros lugares. Es menos común en Asia, África,
Centroamérica y Sudamérica. Las razones para esto no están claras. Es probable que el
uso de más pruebas de detección (pruebas en personas que no presentan síntomas) en
algunos países desarrollados sea responsable por lo menos en parte de esta diferencia,
pero también es probable que otros factores sean importantes.
Historial familiar: el cáncer de próstata parece presentarse con mayor frecuencia en
algunas familias. Los hombres que tienen familiares cercanos (padre o hermano) que han
tenido cáncer de próstata tienen más probabilidades de desarrollar esta condición,
especialmente si sus familiares eran jóvenes al haberse presentado la enfermedad (el
riesgo es mayor para los hombres que tienen un hermano con la enfermedad que para
aquellos con un padre afectado por este cáncer).
Genes: los científicos han descubierto algunos genes heredados que parecen aumentar el
riesgo de cáncer de próstata, pero probablemente son sólo responsables de un pequeño
número de casos. Las pruebas genéticas para la mayoría de estos genes aún no están
disponibles, y se necesitan más estudios en esta área.
Alimentación: no está claro cuál es el papel exacto que desempeña la alimentación en el
desarrollo del cáncer de próstata, aunque algunos factores han sido estudiados. Los
hombres que comen muchas carnes rojas o productos lácteos altos en grasa parecen tener
mayores probabilidades de desarrollar cáncer de próstata. Estos hombres también tienden
a comer menos alimentos de origen vegetal como frutas, ensaladas y verduras. Los
médicos no están seguros de cuáles de estos factores hacen que el riesgo aumente.
Algunos estudios han encontrado que los hombres que consumen una gran cantidad de
calcio o alimentos lácteos pueden tener un mayor riesgo de cáncer de próstata avanzado.
Sin embargo, la mayoría de los estudios no han encontrado está asociación con los
niveles de calcio encontrados en la alimentación regular.
Obesidad: la mayoría de los estudios no ha encontrado que estar obeso (peso excesivo)
está asociado con un mayor riesgo de cáncer de próstata. Algunos estudios han
encontrado que los hombres obesos pudieran tener un mayor riesgo de cáncer de próstata
avanzado y de morir a causa de esta enfermedad, pero no todos los estudios han
encontrado esto.
Fumar: la mayoría de los estudios no ha encontrado una asociación entre el hábito de
fumar y el riesgo de padecer cáncer de próstata. Un reciente estudio vinculó el fumar con
un posible aumento pequeño en el riesgo de morir a causa de cáncer de próstata, aunque
éste nuevo hallazgo necesitará ser confirmado por otros estudios.
Infección e inflamación de la próstata: algunos estudios han sugerido que la prostatitis
(inflamación de la glándula prostática) puede estar asociada con un riesgo aumentado de
cáncer de próstata, aunque otros estudios no han encontrado tal asociación. Algunos
investigadores también han estudiando si las enfermedades de transmisión sexual
pudieran aumentar el riesgo de cáncer de próstata. Hasta el momento, los estudios no han
concordado, y no hay vínculos claros.
¿Se puede prevenir el cáncer de próstata?
La causa exacta del cáncer de próstata se desconoce, por lo que no es posible prevenir la
mayoría de los casos de la enfermedad. No obstante, de acuerdo con lo que sabemos,
existen algunas medidas que puede tomar y que podrían reducir su riesgo de cáncer de
próstata.
Peso corporal, actividad física y alimentación
Los efectos del peso corporal, el ejercicio y la alimentación sobre el riesgo de cáncer de
próstata no están claros, aunque es posible que usted pueda tomar algunas medidas que
podrían reducir su riesgo.
Algunos estudios han encontrado que los hombres que tienen sobrepeso pueden presentar
un riesgo ligeramente menor de padecer cáncer de próstata en general, pero un riesgo
mayor de padecer cánceres de próstata que probablemente sean fatales.
Los estudios han encontrado que los hombres que hacen regularmente ejercicios tienen
un riesgo ligeramente menor de cáncer de próstata. Puede que la actividad vigorosa tenga
un efecto mayor, especialmente en el riesgo de cáncer de próstata avanzado.
Varios estudios han sugerido que una alimentación con un alto contenido de ciertos
vegetales (incluyendo tomates, vegetales crucíferos, soya, frijoles y otras legumbres) o
pescado puede estar asociada con un menor riesgo de cáncer de próstata, especialmente
cánceres más avanzados. Los vegetales crucíferos incluyen repollo, brócoli, coliflor.
Por ahora, el mejor consejo relacionado con la alimentación y la actividad física para
reducir posiblemente el riesgo de cáncer de próstata consiste en:
• Coma al menos 2½ tazas de una gran variedad de verduras y frutas cada día.
• Manténgase físicamente activo.
• Mantenga un peso saludable.
Además, puede que sea sensato limitar los suplementos de calcio y evitar el consumo
excesivo de calcio en la alimentación.
Para más información, lea nuestro documento Guías de la Sociedad Americana Contra El
Cáncer sobre nutrición y actividad física para la prevención del cáncer.
Vitaminas, minerales y otros suplementos
Algunos estudios anteriores sugerían que tomar suplementos de vitamina E o el mineral
selenio podía reducir el riesgo de cáncer de próstata. Sin embargo, en un estudio
abarcador (conocido como SELECT), no se encontró que la vitamina E ni el selenio
redujeran el riesgo de cáncer de próstata. De hecho, se descubrió que los hombres que
tomaban suplementos de vitamina E tenían un riesgo ligeramente mayor de cáncer de
próstata.
Varios estudios actualmente buscan los posibles efectos de la proteína de soya (llamada
isoflavonas) en el riesgo de cáncer de próstata. Los resultados de estos estudios todavía
no están disponibles.
El consumo de suplementos puede presentar tanto riesgos como beneficios. Antes de
comenzar a tomar cualquier vitamina u otros suplementos, consulte con su médico.
Señales y síntomas del cáncer de próstata
A menudo el cáncer de próstata en etapa inicial no causa síntomas. Se puede detectar
mediante una prueba de PSA o un examen digital del recto. Los problemas al orinar
podrían ser una señal de cáncer de próstata avanzado, pero con mayor frecuencia este
problema es causado por una afección menos grave conocida como hiperplasia prostática
benigna (BPH).
Otros posibles síntomas del cáncer de próstata avanzado son:
• Dificultad para tener o mantener una erección (impotencia).
• Sangre en la orina.
• Dolor en la columna, caderas, costillas u otros huesos.
• Debilidad o entumecimiento en las piernas o pies.
• Pérdida de control de la orina y las heces.
Nuevamente, otras enfermedades también pueden causar estos síntomas.
Algunos comentarios generales sobre el tratamiento del cáncer de próstata
Hay muchas cosas en las que tiene que pensar cuando está escogiendo la mejor manera
de tratar y manejar su cáncer. Quizá haya más de un tratamiento entre los cuales escoger.
Tal vez sienta que necesita tomar una decisión rápidamente, pero tómese tiempo para
asimilar la información que ha aprendido. Dependiendo de cada caso, las opciones de
tratamiento para los hombres con cáncer de próstata pueden incluir:
• Terapia expectante (espera en observación) o vigilancia activa.
• Cirugía.
• Radioterapia.
• Criocirugía (crioterapia).
• Terapia hormonal.
• Quimioterapia.
• Tratamiento con vacunas.
Con más frecuencia, estos tratamientos son usados uno a la vez, aunque en algunos casos
pueden ser combinados.
El tratamiento que seleccione contra el cáncer de próstata debe tomar en cuenta:
• Su edad y cuánto tiempo se espera que usted viva.
• Cualquier otra condición médica grave que pueda tener.
• La etapa y el grado de su cáncer.
• Sus propios sentimientos (y la opinión de su médico) sobre la necesidad de tratar el
cáncer.
• La probabilidad de que cada tipo de tratamiento curará su cáncer (o le sea útil de
alguna otra manera).
• Su sentir sobre los efectos secundarios comunes asociados con cada tratamiento.
Puede que muchos hombres encuentren útil obtener una segunda opinión, especialmente
si cuentan con muchas opciones de tratamiento de las cuales escoger. El cáncer de
próstata es una enfermedad compleja, y los médicos pueden tener opiniones distintas sobre las mejores opciones de tratamiento. Puede ser útil hablar con médicos
especializados en las diferentes clases de tratamiento. Le recomendamos que considere
las ventajas de cada tratamiento contra los inconvenientes, efectos secundarios y riesgos.
Los tipos principales de médicos que tratan el cáncer de próstata incluyen:
• Urólogos: cirujanos que son expertos en el tratamiento de enfermedades del sistema
urinario y el sistema reproductor masculino (incluyendo la próstata).
• Oncólogos expertos en radioterapia: médicos que tratan el cáncer con radiación.
• Oncólogos clínicos: médicos que tratan el cáncer con medicamentos, como
quimioterapia o terapia hormonal.
Es importante hablar con el médico sobre todas sus opciones de tratamiento, incluyendo
los objetivos y los posibles efectos secundarios, para ayudarle a escoger el tratamiento
que mejor se ajuste a sus necesidades.